Los prejuicios, se elaboran a partir de opiniones que surgen antes de juzgar la determinación de las evidencias. En otras palabras, un prejuicio es una crítica que se realiza sin tener los suficientes elementos previos para fundamentarla. Si una persona que nunca viajó a una ciudad afirma que sus habitantes son poco afectuosos y distantes en el trato, estará incurriendo en un prejuicio.
Si alguien cree que no es capaz sin intentarlo, si se cree menos que los demás, estos también son prejuicios.
Lo que nos esclaviza a los prejuicios es el temor a lo que le puede pasar.
El fuerte es fuerte hasta que el débil se lo permite, la fuerza que tiene Satanás es la que el mismo cristiano le puede dar.
No es que tus enemigos sean grandes, es que tú te sientes pequeño, siempre que mires el problemas desde abajo, lo veras grande la única forma de ver el problema pequeño es mirándolo desde arriba y la uniforma de estar arriba es estando tomado de la mano de Jesucristo.
A Ismael todos le tenían miedo por lo que él hacía, El mato a Gedalias. V 2 “Y se levantó Ismael hijo de Netanías y los diez hombres que con él estaban, e hirieron a espada a Gedalías hijo de Ahicam, hijo de Safán, matando así a aquel a quien el rey de Babilonia había puesto para gobernar la tierra.”
Era astuto para la maldad. V 6-7 “Y de Mizpa les salió al encuentro, llorando, Ismael el hijo de Netanías. Y aconteció que cuando los encontró, les dijo: Venid a Gedalías hijo de Ahicam.
41:7 Y cuando llegaron dentro de la ciudad, Ismael hijo de Netanías los degolló, y los echó dentro de una cisterna, él y los hombres que con él estaban. ” Una cosa es ser cristiano amador de Jesucristo, y otra muy diferente que tengamos que ser ingenuos. Dios nos manda a que seamos prudentes en lo que hacemos y con quien lo hacemos. No se trata que desconfiemos de todos, pero si no a todos le podemos abrir nuestro corazón. Mateo 10: 16 “He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.”
41:7 Y cuando llegaron dentro de la ciudad, Ismael hijo de Netanías los degolló, y los echó dentro de una cisterna, él y los hombres que con él estaban. ” Una cosa es ser cristiano amador de Jesucristo, y otra muy diferente que tengamos que ser ingenuos. Dios nos manda a que seamos prudentes en lo que hacemos y con quien lo hacemos. No se trata que desconfiemos de todos, pero si no a todos le podemos abrir nuestro corazón. Mateo 10: 16 “He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.”
Indiscutiblemente Ismael era un hombre muy fuerte o al menos eso parresia. Y digo parresia, porque su poderío y fuerza le duro solo hasta que un hombre tomo la decisión de enfrentarlo, johanán dijo ya no más. V 11-12 “Y oyeron Johanán hijo de Carea y todos los príncipes de la gente de guerra que estaban con él, todo el mal que había hecho Ismael hijo de Netanías.
41:12 Entonces tomaron a todos los hombres y fueron a pelear contra Ismael hijo de Netanías, y lo hallaron junto al gran estanque que está en Gabaón.”
41:12 Entonces tomaron a todos los hombres y fueron a pelear contra Ismael hijo de Netanías, y lo hallaron junto al gran estanque que está en Gabaón.”
La única forma de ser libres de tus temores es si los enfrentas, Satanás no puede seguir controlando tu vida, la enfermedad, la pobreza no pueden estar encima de ti, es la hora de decir ya basta y pensar en hacer algo.
Si tú te atreves a enfrentar tus prejuicios, tus temores harás que otros también tomen esa decisión. V 13-14 “Y aconteció que cuando todo el pueblo que estaba con Ismael vio a Johanán hijo de Carea y a todos los capitanes de la gente de guerra que estaban con él, se alegraron.
41:14 Y todo el pueblo que Ismael había traído cautivo de Mizpa se volvió y fue con Johanán hijo de Carea.” Si tú tomas la decisión de seguir a Cristo otros de tu familia harán lo mismo. Hechos 16: 31 “Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.”
41:14 Y todo el pueblo que Ismael había traído cautivo de Mizpa se volvió y fue con Johanán hijo de Carea.” Si tú tomas la decisión de seguir a Cristo otros de tu familia harán lo mismo. Hechos 16: 31 “Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.”
Si te enfrentas a tus enemigos, a tus temores, a tus prejuicios, ellos huirán de ti. V 15 “Pero Ismael hijo de Netanías escapó delante de Johanán con ocho hombres, y se fue a los hijos de Amón.”
El diablo sabe que el día en que te sometas a Cristo y decidas enfrentarte al diablo, a él solo, le queda huir de ti. Santiago 4: 7 “Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.”
Hacia donde miremos, encontraremos que los verdaderos obstáculos para la paz y la superación son la voluntad y los sentimientos de los hombres, las convicciones humanas, los prejuicios y las opiniones. Si queremos librarnos de las guerras, y sobre todo de las derrotas tendremos antes que librarnos de todos los obstáculos que están en nuestra mente.
La decisión de cómo quieres vivir es tuya.
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